El combustible de aviación sostenible o SAF (Sustainable Aviation Fuel) se ha convertido en una de las principales alternativas para reducir la huella de carbono en la industria aeronáutica. Dentro de los diversos procesos de producción de SAF, el HEFA (Hydroprocessed Esters and Fatty Acids) destaca por ser el método más desarrollado y comercialmente viable. Este proceso transforma aceites vegetales, grasas animales y aceites de cocina usados en un combustible compatible con las aeronaves actuales, logrando una reducción significativa de las emisiones de CO₂.
¿Qué es el proceso HEFA?
El proceso HEFA consiste en la hidrogenación de ésteres y ácidos grasos para producir hidrocarburos similares al queroseno de aviación. Su principal ventaja es que permite la utilización de aceites renovables y residuos orgánicos, reduciendo la dependencia del petróleo y disminuyendo las emisiones contaminantes.
Materias primas utilizadas en el proceso HEFA
El proceso HEFA puede utilizar diferentes fuentes de materia prima, incluyendo:
- Aceites vegetales: Aceite de palma, soja, colza y jatrofa.
- Grasas animales: Sebo de ganado, aceites de pescado.
- Aceites de cocina usados: Provenientes de restaurantes e industrias alimentarias.
- Residuos de aceites industriales: Grasas residuales de procesos agroindustriales.
El uso de aceites reciclados y grasas animales es clave para aumentar la sostenibilidad del proceso, ya que evita la competencia con la producción de alimentos y contribuye a la economía circular.
Proceso de producción del SAF mediante HEFA
El proceso de producción de SAF mediante HEFA consta de las siguientes etapas:
1. Pretratamiento de la materia prima
Antes de la conversión en combustible, los aceites y grasas deben pasar por un proceso de purificación para eliminar impurezas como metales, agua y contaminantes. Este paso es fundamental para evitar problemas en las etapas posteriores.
2. Hidrogenación y desoxigenación
Los aceites y grasas son sometidos a un proceso de hidrogenación en el que se eliminan los oxígenos presentes en los ácidos grasos. Esto se logra mediante la adición de hidrógeno (H₂) en presencia de un catalizador, produciendo hidrocarburos saturados.
3. Isomerización y craqueo
Para mejorar las propiedades del combustible, los hidrocarburos resultantes se someten a procesos de isomerización (para modificar la estructura molecular) y craqueo catalítico (para romper cadenas largas y obtener moléculas de menor peso molecular). Esto ayuda a obtener un combustible con características similares al queroseno convencional.
4. Fraccionamiento y purificación
El producto final se somete a una destilación fraccionada para separar diferentes fracciones de hidrocarburos. Se obtiene una mezcla que incluye diésel renovable y SAF, los cuales pueden ser utilizados en distintos sectores.
5. Mezcla con combustible convencional
El SAF obtenido a través del proceso HEFA puede ser mezclado hasta un 50% con queroseno de aviación convencional, según las regulaciones actuales. Esto permite su uso sin necesidad de modificar los motores o la infraestructura de los aeropuertos.
Ventajas del SAF producido mediante HEFA
Sostenibilidad y reducción de emisiones
- Reduce hasta un 80% las emisiones de CO₂ en comparación con el queroseno fósil.
- Aprovecha residuos y subproductos, contribuyendo a la economía circular.
- Reduce la dependencia del petróleo y fomenta el uso de energías renovables.
Compatibilidad con la aviación actual
- Puede mezclarse con el queroseno convencional sin necesidad de modificar motores o infraestructura aeroportuaria.
- Cumple con los estándares internacionales de calidad (ASTM D7566).
Desarrollo comercial y escalabilidad
- Tecnología madura con varias plantas de producción en operación a nivel mundial.
- Empresas como Neste, World Energy y TotalEnergies ya producen SAF mediante este proceso.
- Permite la producción a gran escala con inversiones en plantas de refinamiento adaptadas.
A pesar de sus beneficios, el SAF producido por HEFA enfrenta algunos desafíos:
- Disponibilidad de materia prima: La producción masiva requiere grandes volúmenes de aceites usados y grasas, lo que podría generar competencia con otros sectores.
- Coste de producción: Aún es entre 2 y 5 veces más caro que el queroseno convencional, lo que limita su adopción masiva.
- Regulaciones y certificaciones: Es necesario un mayor apoyo gubernamental para incentivar su producción y uso.
El futuro del SAF HEFA dependerá de la capacidad de la industria para mejorar la recolección de aceites usados, optimizar procesos y reducir costes. Se espera que en los próximos años su uso crezca de manera significativa, impulsado por las regulaciones ambientales y la demanda del sector aeronáutico de alternativas más limpias.
El proceso HEFA es una de las soluciones más prometedoras para reducir las emisiones de la aviación y avanzar hacia una industria más sostenible. Su tecnología madura, combinada con el uso de residuos orgánicos y su compatibilidad con la infraestructura actual, lo posiciona como una opción viable para la descarbonización del transporte aéreo. Sin embargo, su crecimiento dependerá de la disponibilidad de materia prima, el desarrollo de políticas de apoyo y la mejora en la eficiencia de los procesos para reducir costes.
En los próximos años, el SAF HEFA jugará un papel clave en la transición hacia un sector aéreo más ecológico y sostenible.
